lunes, 23 de diciembre de 2013

El Patriarcado en la actualidad

¿Existe el patriarcado o ya ha desaparecido? ¿Es propio únicamente de países lejanos o de épocas remotas de la Historia?
La antropología ha definido el patriarcado como un sistema de organización social en el que los puestos clave de poder (político, económico, religioso y militar) se encuentran, exclusiva o mayoritariamente, en manos de varones. El Patriarcado subyace inscrito en la civilización humana desde miles de años antes de nuestra era. Ocurrió antes de la formación de la propiedad privada y de la sociedad de clases. Se originó a partir de una época determinada, después de sociedades anteriores llamadas por algunos historiadores “matriarcales” que no eran el reverso de patriarcado. Con lo cual se contrarresta la idea del patriarcado ahistórico, invisible, eterno e inmutable y por tanto Inamovible. Esto que se ha considerado una obviedad, desde los años 60, con el advenimiento del feminismo, está cuestionado y se dan pasos que avanzan en el sentido de reconocer que el Patriarcado al ser una convención cultural y social está sujeta a rectificación, reforma o sustitución por otro constructo cultural y social.  En ello estamos.
Como bien nos recuerda Celia Amorós en “La gran diferencia y sus pequeñas consecuencias... para las luchas de las mujeres” (Cátedra, 2005), el patriarcado no es una esencia, sino un sistema metaestable de dominación ejercido por los individuos que, al mismo tiempo, son troquelados por él. Todos formamos parte de él y estamos forjados por él pero eso no nos exime de la responsabilidad de intentar distanciarnos críticamente de sus estructuras y actuar ética y políticamente contra sus bases y sus efectos. Que el patriarcado sea metaestable significa que sus formas se van adaptando a los distintos tipos históricos de organización económica y social, preservándose en mayor o menor medida, sin embargo, su carácter de sistema de ejercicio del poder y de distribución del reconocimiento entre los pares.

Personalmente creo que ese es el proceso en el que nos encontramos en relación con el tema de nuestra próxima Copa Filo. En la actualidad, en España, tenemos ejemplos sobrados de esa adaptación.

Rita Alcaide



martes, 3 de diciembre de 2013

Pequeñeces

Muchas de las propuestas hedonistas están incorporadas a la visión del mundo del hombre moderno: el aprecio del cuerpo y de su salud, el individualismo, el énfasis en vivir el momento presente, el rechazo a todo lo que ate o constriña, la búsqueda de satisfacción (ahora mediante el consumo),… de modo que su efecto liberador ya está colmado. *** El hedonista es un ser estático; como cualquier pasión lo conturba difícilmente lo veremos escalando el Everest o cartografiando África o componiendo una sinfonía imposible…. Pero en todo esto hay algo muy humano; no en vano somos herederos de aquel mono desnudo que abandonando sus cálidas tierras originarias pobló toda la Tierra atravesando cordilleras y glaciaciones. Walt Whitman nos dijo: “Esta mañana, antes del alba, subí a una colina para mirar el cielo poblado, Y le dije a mi alma: Cuando abarquemos esos mundos, y el conocimiento y el goce que encierran, ¿estaremos al fin hartos y satisfechos? Y mi alma dijo: No, una vez alcanzados esos mundos proseguiremos el camino” *** Si nuestro cerebro ha evolucionado por acumulación no solo hay que satisfacer al más primitivo. Hallamos tanta complacencia en saciar el apetito como en oír una melodía o descubrir una verdad oculta. *** La felicidad no tiene contenido, es un mito(G. Bueno). Los consejos que se dan para “alcanzarla” son reglas morales de comportamiento que son consecuencia del lugar que asignamos al hombre en el universo, el cual depende de nuestra interpretación (El significado no está en la realidad sino en nuestra interpretación). “Aunque nada cambie, si yo cambio, todo cambia.” (Balzac). La interpretación de la “felicidad” de Casanova, Epicúro, Teresa de Calcuta, Larra o cualquier hijo de vecino son incompatibles incluso contradictorias. Recordemos aquellos versos de Teresa de Jesús: Vivo sin vivir en mí, y tan alta vida espero, que muero porque no muero. Vivo ya fuera de mí, después que muero de amor, porque vivo en el Señor, que me quiso para sí; cuando el corazón le di puso en mí este letrero: “Que muero porque no muero”. … *** Los hombres somos también cultura. Los temores que Epicuro (hedonista ascético) proponía destruir no son los nuestros ahora porque nuestra cultura es distinta, entre otras cosas gracias a él. No sufrir no es gozar. Hay deseos que no son necesarios ni naturales y que son deseables pues proporcionan placeres considerables (Onfray). (VERDAD, BELLEZA, BONDAD). *** De una visión materialista de la naturaleza no se desprende lógicamente que no podamos proponernos metas que comporten sacrificio (Si Dios no existe todo está permitido). Por ejemplo si ese sacrificio es previsible que redunde en beneficio de nuestros hijos pues tan mío es el placer desdeñado como al amor a mis hijos. ¿Todos los deseos merecen ser satisfechos? Hasta los hedonistas creen que hay que andarse con cuidado con los deseos y que a veces es necesario reprimirlos; es una exigencia, al menos, de vivir en sociedad. *** ¿Existe la posibilidad social de un referente único de felicidad?¿Podría un esclavo o un basurero ser hedonista?

lunes, 2 de diciembre de 2013

La Luz en el Arte y la Ciencia del mundo islámico


Una exposición muy interesante que os invito a ver en la Fundación Focus-Abengoa en Sevilla, los Domingos tardes gratis, los juviletas 2.75  euritos .

 
http://www.focus.abengoa.es/web/es/index.html

Fundación Madariaga

Paco Cuadrado participa en una exposición colectiva en la Fundación Madariaga Avda. Maria Luisa s/n junto al Costurero de la Reina. Participan José Luis Mauri, Santiago del Campo, Carmen Laffón, Joaquín Sáenz y Feliz de Cardenas  y Claudio Diaz
Inauguración 4 de Diciembre a las 20.30  horas, estará abierta hasta el 24 de Enero Desde aquí quiero invitaros a todos los que queráis acompañarnos.