Empecemos por la definición:
VIOLENCIA: Una situación en la que una
persona con más poder abusa de otra con menos poder
VIOLENCIA ORGANIZADA es la violencia ejercida
por un grupo, estado o institución, sobre individuos o grupos. Es decir que se
trata de decisiones y de acciones tomadas unilateralmente sin negociaciones con
las personas afectadas, realizada por el beneficio exclusivo de un subgrupo
social
VIOLENCIA HACIA LAS MUJERES: Toda acción o
conducta pública o privada en razón de su género que cause daño o sufrimiento
físico, sexual o psicológico a la mujer mediante el empleo de fuerza física o
violencia psicológica, verbal, intimidación o persecución.
Muchos escritores, científicos, dramaturgos y
cineastas han apoyado la concepción de la supuesta maldad innata del ser
humano. Si por todas partes se manifiesta la violencia y la agresividad, ¿cómo
podemos negar que la agresividad sea instintiva, que pertenezca a la propia
naturaleza humana? Así se llega a una explicación. La explicación que lo
explica todo.
El gran filósofo inglés John Stuart Mill, escribió al respecto: “de las posibles maneras de eludir las influencias de la moral y la
sociedad sobre la mente humana, la más corriente es la de hacer responsable de
las diferencias de comportamiento y carácter a diferencias naturales innatas“.
Sin embargo sabemos que: “La característica más destacada de la especie humana es su
educabilidad, el hecho de que todo lo que sabe y hace como ser humano ha de
aprenderlo de otros seres humanos. Y esto lo ha ido aprendiendo en sus cuatro
millones de años de evolución” Ashley
Montagu.
El psiquiatra Luis Rojas Marcos explica que "las
semillas de la violencia se siembran en los primeros años de la vida, se
cultivan, se desarrollan durante la infancia y comienzan a dar sus frutos
malignos en la adolescencia". Por tanto la violencia -como apunta el
profesor Sanmartín-, "es la resultante de la influencia de
la cultura sobre la agresividad natural y sólo factores culturales pueden
prevenirla".
Lo que ha motivado la propuesta y la
aceptación de este asunto como tema de tertulia ha sido sin duda el aumento de
los casos de violencia hacia las mujeres con resultado de muerte, muertes
producidas por medios en muchos casos (múltiples puñaladas / golpes, etc.) que
indican ensañamiento posiblemente en base al odio o la frustración. Y lo que
buscamos es un acercamiento al tema, poner
en común nuestras opiniones y tal vez llegar a cuestionar la violencia como vía
válida para la resolución de conflictos entre las personas. Esta vía, que apela
al poder, al control y a la lógica del todo/nada, debe ser transformada en otra
que tienda al pacto y al consenso potenciando el poder de las personas y no el
poder sobre o contra ellas.
En relación a la violencia de género: comprender
la actual y estrecha asociación entre masculinidad y violencia, que
tiene su razón de ser en los formatos y
prácticas de la masculinidad tradicional y obligatoria que la cultura propone
para los varones. Estas propuestas son la matriz con que la mayoría de los
varones construyen su subjetividad y contienen elementos que las transforman en
productoras de desigualdad y daño para las mujeres, para otros varones menos
poderosos, y son mutiladores del desarrollo emocional y empático masculino.
Comprometer a los varones a romper el
silencio corporativo y trabajar junto con las mujeres en la lucha contra la
violencia. Y no sólo contra las grandes violencias, sino también contra las
múltiples formas de violencia social, sexual y doméstica contra ellas.
Rita Alcalde Sierra
No hay comentarios:
Publicar un comentario